¿Qué metodología predomina en las escuelas rurales?

Al describir las escuelas rurales como aulas en las que convive alumnado de diferentes edades, llega un momento en el que nos preguntamos cómo conseguir que todos estos alumnos aprendan dependiendo de su nivel de conocimiento, es decir, cuál sería la mejor estrategia metodológica para conseguir un aprendizaje exitoso en este tipo de centros.

A continuación, se describen a grosso modo las principales características relacionadas con la metodología que forman parte de la escuela rural y las estrategias metodológicas que se dan en las escuelas de estos contextos rurales.

La escuela rural favorece el desarrollo de una pedagogía activa. Al ser pequeña y contar con pocos miembros, facilita la participación directa e intensiva de todos los miembros; y al ubicarse en medio de un entorno natural, el contacto con el exterior es palabra fácil y, si se quiere, un hecho cotidiano.

Los maestros de las escuelas rurales pueden impartir una enseñanza individualizada pero sólo durante un tiempo limitado. Esto favorece lo que se conoce como el alumnado-tutor, que lo podemos definir como un alumno, generalmente de los de mayor edad que conforman un aula multigrado, el cual tiene un papel de mediador entre el maestro y otro compañero que requiera ayuda. De esta forma el niño/a tutor/a desarrolla mecanismos de resolución de tareas y conflictos, además de un mayor conocimiento de sí mismo, una mayor autoestima y aprende habilidades sociales y de convivencia. Este alumno/a- tutor/a va tomando conciencia de las múltiples alternativas que existen para aprender y por lo tanto interioriza la competencia de aprender a aprender.

Este tipo de metodología heterogénea, junto con la confianza en sí mismo (autoestima) y la confianza en sus acciones favorecen la autonomía del niño/a y esta autonomía genera que sea independiente en su trabajo diario y que tenga su propio ritmo de aprendizaje, siendo el profesor principalmente un guía para su enseñanza.

El proceso de enseñanza-aprendizaje tiene lugar en una especie de micro sociedad en el aula rural, la cual se basa en el respeto hacia las diferencias e intereses personales y grupales, en el compañerismo, el desarrollo de conductas éticas, además tiene lugar un pensamiento divergente como forma de estructurar el conocimiento y un compromiso hacia las obligaciones contraídas a nivel grupal y personal.

La escuela rural es una escuela con un sistema de enseñanza particular: la enseñanza circular o concéntrica. Los maestros de la escuela rural, cuando dan clase, generalmente lo hacen para los alumnos de un determinado nivel educativo. En la medida en que en la misma aula hay alumnos de distintas edades, los alumnos de los otros niveles pueden escuchar lo que el maestro explica, en principio, para un determinado grupo de edad. De modo que los alumnos mayores, sobre todo los que van más retrasados, pueden repasar lo que ya se les había explicado durante el curso anterior y los alumnos más pequeños, sobre todo los más aventajados, se pueden adelantar en lo que se les explicará en los cursos posteriores.

La escuela rural es una escuela muy flexible y libre. La escuela rural no tiene demasiadas trabas burocráticas, salvo aquéllas impuestas por la Administración, y eso hace que todo se pueda organizar bastante al aire de los que llevan las riendas de la escuela.